Pasaban mucho tiempo juntos. Incansablemente discutían sobre sonidos y como perfeccionar sus creaciones para sacar las conclusiones acerca de como seleccionar material y el modo adecuado de su elaboración. De esta manera los resultados podían ser provados inmediatamente.

Mientras Francesco Dalla Quercia se dedicaba siempre mas a la construcción moderna de los instrumentos de arco, Johannes se dedicaba a la restauración, construcción y ejecución filológica de los instrumentos históricos. (Baroco, Clásico y Romántico).

Dalla Quercia abriría su taller en el 1989 en el centro histórico de Bologna, mientras la carrera de Loescher lo llevaría a Nurnberg (Estudio de la restauración en "Germanisches Nazionakmuseum") para mas tarde abrir su bodega en Koln en el 1999.

Todabía hoy un activo contacto une a los dos lutiers, enriqueciéndose en el conocimiento sobre la construcción de la liuteria antigua y moderna y en la restauración.

No es importante solamente el estudio, el buen varniz y el perfeccionamiento del instrumento, el buen resultado del instrumento esta decidido una vez hecha la elección de la madera.

Todos los anos los dos se encuentran en la casa de campo en la colina "bolognese" para curar la gran cantidad de abetos (en parte del siglo XVIII), acero, y "pioppo", cortes de los troncos 13 anos antras.